El tajine de cordero, también llamado tayín, es una de las recetas más tradicionales del mundo musulmán, pues es utilizado como un plato típico en la fiesta de sacrificio de este animal. Aunque existen muchos guisos diferentes relacionados, con multitud de ingredientes, los que no pueden faltar son una buena carne de cordero y las ciruelas.
Es una receta sin complicación alguna con alimentos que pueden encontrarse fácilmente, aunque bien es cierto que requiere más tiempo que otros platos al ser un guiso que necesita de períodos de cocción específicos, pero el resultado merece la pena.
Ingredientes:
- 1 kilogramo de pierna de cordero
- Media cebolla
- Pimienta negra (3 gramos aproximadamente)
- Sal
- Aceite de oliva
- 1 cucharadita de canela molida
- 1 rama de canela
- Agua de azahar
- Azafrán
- 350 gramos de ciruelas caramelizadas
- 1 cucharada de cúrcuma
Tiempo de preparación: 1 hora y 40 minutos
Dificultad: Media
¿Cómo hacer tajine de cordero?
En una cazuela echamos un poco de aceite de oliva y calentamos a fuego lento. Colocamos los trozos de la pierna de cordero y dejamos que vaya sellándose por todos los lados.
Pasados uno o dos minutos añadimos sal al gusto y pimienta negra molida para que la carne vaya cogiendo los sabores de las especias.
Picamos la cebolla y la añadimos a la cazuela. A continuación, vamos removiendo para que se vaya pochando y dorando el cordero poco a poco.
Una vez pochada la cebolla, agregamos la cucharada de café de cúrcuma y de azafrán, sin olvidar mover de manera continua.
Posteriormente, se añade una cucharadita de agua de azahar junto con la canela molida, un imprescindible en la cocina árabe. Esto servirá para aromatizar la carne y darla un toque de sabor diferente.
Después añadir todos los ingredientes en la cazuela, echamos agua hasta que cubra más o menos tres cuartas partes de la preparación, removiendo para que se haga todo por igual y dejamos cocinar durante unos 40 minutos aproximadamente, dependiendo de la temperatura del fuego.
Cuando se haya pasado ese tiempo, colocamos el contenido en un tajín slaoui (recipiente de barro típico) junto con el caldo y lo metemos al horno durante otros 40 minutos, precalentado con anterioridad a unos 170º.
Tras esos minutos, la salsa se habrá reducido y podremos pasar al siguiente paso que consistirá en añadir las ciruelas caramelizadas. Si sois amantes de los frutos secos, también se podrían añadir otros ingredientes como pasas u orejones. Dejamos hornear otros 10-15 minutos y si observamos que se está quedando muy seco, añadimos un poco de agua.
Emplatamos al gusto con la decoración que queramos y si podemos, lo acompañamos con unas almendras fritas y unos trozos de pan árabe.